11 de Septiembre Día de la Virgen de Coromoto
Un poco de historia
Los Indios Cospes
Entre los Indios que habitaban la región de Guanare había una parte designada con el nombre Cospes. Cuando en 1591 llegaron los españoles allí y se hizo el reparto de tierras e Indios en encomiendas unas cuantas familias de los Cospes se disgregaron de su Tribu y huyeron internándose en las selvas de las dilatadas montañas y valles que se extienden entre Boconó de Trujillo y Guanare hacia las riberas del río Tucupido. En esos lugares apartados se mantuvieron los Cospes muchos años sin acordarse nadie de ellos, hasta que sonó en el reloj de la Providencia la hora de su conversión mediante la maternal intervención de María Santísima. Un español noble y honrado como buen cristiano era llamado Juan Sánchez había obtenido años atrás unos terrenos en la margen derecha del Guanare a unas 5 leguas de la Villa del Espíritu Santo que es la ciudad de Guanare.
El Nombre de Coromoto
Varios años llevaban los Indios Cospes sin que los civilizadores extranjeros hubieran podido conseguir que ellos descendieran a tomar parte en el aprendizaje del cultivo de los campos y de la Doctrina Cristiana. Estaban, según refieren en la historia, en aquellos lugares de la montaña en donde ellos se habían ocultado hacia las fuentes del río Tucupido y su margen derecha. Aquí se dejó ver la Virgen no solo del Jefe de la Tribu sino de varios otros indios y es también donde les mandó a que fueran adonde los blancos españoles a que los bautizaran; por indicación de la Virgen los Indios en número de varios centenares dejaron la montaña y se pusieron a las órdenes de Juan Sánchez quien les fijó para su residencia y trabajo unos campos de su propiedad conocidos con el nombre de Coromoto nombre propio de una quebrada en la confluencia de los ríos Tucupido y Guanare de la cual toma la denominación aquel paraje la Santísima Virgen que allí se apareció.
Primera Aparición de la Virgen a los Indios Cospes
Según refiere la historia la Virgen de Coromoto apareció repetidas veces a los Indios Cospes y no solamente a los mayores sino también a los hijos de estos según testimonio de los que fueron Párrocos de Guanare en tiempo no lejano de las Apariciones.
La Primera Aparición tuvo lugar en el año de 1651 cuando el Cacique de los Cospes se dirigía en compañía de su mujer al trabajo de campo. Al llegar a una quebrada una hermosa Señora que sostenía en sus brazos un precioso niño, apareció caminando sobre las aguas diciéndole en la lengua propia de los Indios: “Que salieran a donde estaban los blancos para que les echaran agua sobre sus cabezas para subir al Cielo”.
Segunda Aparición de la Virgen de Coromoto
El Cacique de los Cospes que en un principio asistía gustoso a las instrucciones catequísticas, disgustó luego añorando sin duda la soledad de los bosques y se retiró sin recibir el bautismo. Triste y pensativo estaba el indio recostado a su barbacoa días antes de su fuga. Con él se hallaba su esposa, su hermana Isabel y un hijo de éste el cual era llamado Juan.
Todo era silencio en la noche, pues las Indias al ver de tan mal humor al Cacique, no se atrevían a decir palabra. Habrían transcurrido algunos instantes desde la llegada del Cacique cuando de modo visible y corpóreo la Virgen Santísima se presentó en el umbral del bohío despidiendo rayos abundantes como los rayos del sol al mediodía, según palabras de la India Isabel, que iluminaron el recinto con celestial claridad.
Al verla el cacique pensó que la Gran Señora venía a reprocharle su mal proceder y le dijo: “¿Hasta cuándo me quieres perseguir? bien te puedes devolver no he de hacer más lo que tú me mandes. Por ti dejé mis conucos y he venido a pasar trabajos”. Como las mujeres reprendían al Indio el modo como trataba a la Bella Mujer, le dijo a la Virgen que lo miraba sonriente: “¿Con matarte me dejáras?”. Adelantando entonces la Virgen hacia el Cacique, él se abalanzó sobre ella para asirla del brazo y echarla fuera quedando todo envuelto en tinieblas. -Aquí la tengo, dice el Indio en tono de furia y triunfo. –Muéstrala para verla responden las mujeres y a la luz de las ascuas que arden en el tosco fogón abrió el Indio su mano y contemplan todos el retrato de la Bella Mujer.
Conversión y Muerte del Cacique
El pobre Indio resistió por algún tiempo más la acción de la gracia que golpeaba insistentemente a las puertas de su corazón, pero al fin la Virgen salió triunfante pues el Cacique al verse mortalmente herido por la mordedura de una serpiente cuando huía a la espesura de la selva pidió a gritos el Bautismo, que le fue suministrado por un buen Cristiano de la Ciudad de Barinas.
La Virgen de Coromoto Apóstol de Venezuela
De las palabras que la Virgen dijo al Cacique y a los indios Cospes desde la primera de sus apariciones: “Salgan a donde están los blancos para que les echen agua sobre sus cabezas para ir al Cielo”, se deduce que la Virgen se constituyó en Misionera de los Indios venezolanos siendo en la Aurora de la Fe del nuevo mundo como un sol brillantísimo que irradiará los más fulgurantes resplandores. Mas no hizo sus apariciones solo para convertir a los Indios sino que dejó su retrato en esta tierra privilegiada para que iluminara en la sucesión de los tiempos. No significa otra cosa los múltiples prodigios que su poder ha obrado a favor de sus devotos y continúa obrando en el orden de la naturaleza como el de la gracia para conservar siempre el vivo fuego de la Fe en el pueblo venezolano. Consideremos cómo nosotros debemos imitar a la Virgen de Coromoto trabajando en la salvación de las almas.
La Virgen de Coromoto Madre de Venezuela
Hay que tomar en cuenta cómo la Virgen Santísima quiso aparecer en Coromoto el día en que se celebra la fiesta de su nacimiento entre los hombres para demostrarnos la gran predilección que por nosotros tuvo desde los primeros instantes de nuestras vida. Ahora llenos de agradecimientos de la Providencia Divina que en el amanecer de este nuevo mundo a las luces de la Fe y de la civilización envió a los Indios venezolanos la Aurora de la Gracia para que les diera la vida cristiana enseñándoles el camino que conduce a la Iglesia Católica.
Tratemos finalmente de corresponder al llamado que como a los Indios Cospes nos hace nuestra Madre Celestial para que entremos de lleno en la práctica de los deberes cristianos a fin de manifestarnos como verdaderos hijos de la Virgen de Coromoto.
La Virgen de Coromoto Protectora de Venezuela
Muchos son los prodigios con que la Virgen de Coromoto ha favorecido a sus hijos que llenos de confianza han acudido a su regazo. La historia que no se ha escrito y que tal vez no se escribirá, es más elocuente para los innumerables testigos de las bondades de María que todos los libros que se pueden escribirse con los favores públicos que la misma Virgen a concedido. ¿Quién no podrá contar alguna gracia así propia, concedida por la Virgen de Coromoto?.
El resurgir de la Fe obrada por la Virgen de Coromoto es un de los favores generales concedidos a Venezuela entera, una de las obras más patentes con que ha demostrado la protección especial que dispensa al pueblo venezolano. ¿Quién no es testigo de este celestial resurgimiento, tanto general como particular manifestado en las peregrinaciones nacionales a Guanare?. Demos gracias a María Santísima por tan singular protección y procuremos hacernos dignos, con nuestra conducta, de merecerle particularmente.
La Virgen de Coromoto Misionera de Venezuela
Muchas son las devociones marianas como las distintas advocaciones de la Santísima Virgen nuestra Patria. Todas son sin duda dignas de consideración y aprecio, pero ninguna como la de la Virgen de Coromoto. Ella es la primera en el orden del tiempo, pues ninguna como ella puede remontarse a los tiempos de la Evangelización primitiva de los Indios cuando la Fe empezaba a nacer en Tierras Americanas. Ella es la única que tiene por origen la aparición real de la Santísima Virgen en persona a nuestros aborígenes, dejándoles el don inestimable de su imagen. Ella es la que con más fuerzas atrae los corazones de toda Venezuela, pues desde las remotas regiones acudieron y acuden llenos de Fe y Amor los peregrinos.
Ella por tanto tiene más derechos que ninguna otra devoción a ser proclamada Patrona Celestial de nuestra Patria. Proclamémosla muy alto desde el fondo de nuestros corazones, exaltémosla en nuestro hogar y trabajo convirtiéndonos en apóstoles de la devoción a Nuestra Señora de Coromoto. Que así sea. Amén.
Oración
¡Oh Virgen de Coromoto!
En tus manos deposito esta súplica
(Tal intención, tal necesidad)
Bendícela
Preséntala al Corazón de Jesús.
Haz valer tu amor de Madre y tu poder de Reina
¡Oh María!
Yo cuento con tu ayuda
Yo confío en tu poder
Yo me entrego a tu voluntad
Yo estoy seguro(a) de tu misericordia
¡Madre de Dios y Madre mía!
Ruega por mí
Llévame al Corazón de Jesús
(Se reza un Padre Nuestro, Ave María, Gloria)